Este tipo de colchones se caracterizan por su durabilidad y elasticidad, que garantizan una perfecta adaptación ergonómica sin efecto de memoria. Su composición ha sido creada mediante una mezcla de viscosa natural y sintética. El látex aporta un descanso cómodo, debido a que tiene una firmeza baja o media y es adecuado para personas alérgicas, ya que es un material natural.
Este tipo de núcleo no es aconsejable en ambientes húmedos ni para niños, puesto que es un material que necesita mucha transpiración para evitar problemas de humedad. Por este motivo, aconsejamos que se utilice sobre somieres de láminas, que le proporcionarán mayor ventilación.